En Argentina estamos haciendo autos viejos

En Argentina estamos haciendo autos viejos

Por Carlos Norberto Puga: Magister en Educación. Docente Técnico y Creador del Auto Solar “TRONADOR” en 1988. Co-Organizador del primer Rally Ecológico de la Ciudad de Buenos Aires en 1991. Mail: carlospuga2017@gmail.com. Instagram: @tronadorsolar.

Si tus acciones inspiran a otros a soñar más, aprender más, hacer más y ser más, eres un líder”, dijo John Quincy Adams.

El periodista Jorge Lanata, recientemente en su programa radial señaló… “Estamos haciendo autos viejos” en clara alusión a la realidad actual (yo diría histórica) de la industria automotriz argentina, que durante el mes de marzo del corriente año, sus ventas cayeron más del 36% respecto a marzo el 2023.

Más adelante, Lanata señala sobre la diferencia con las industrias automotrices de Europa, EE.UU. y Japón que ya basan su manufactura en vehículos híbridos o eléctricos. Me permito señalar, que también Corea del Sur, China, Turquía, Croacia, Rusia, Israel, y otros países, desde hace años apuestan a la ELECTROMOVILIDAD en alguno o todos los modelos que producen.

Simplemente recordar, que el primer auto eléctrico de producción seriada y con publicidad masiva de finales del Siglo XX, fue el GM “IMPACT” producido en EE.UU. a partir de 1996. Es decir, la industria estaba “avisando” que se venían cambios en la movilidad para los próximos años.

Cuando Hans Tholstrup y yo dimos en Marzo de 1999, la 1er Conferencia Internacional sobre Electromovilidad de Latinoamérica, aquí en Buenos Aires, señalamos esas tendencias a nivel mundial, como así también la urgente necesidad de cambiar el paradigma EDUCATIVO, de INFRAESTRUCTURA e INDUSTRIAL de la Argentina y la Región.

Coincido con Lanata. Estamos haciendo autos viejos, es más… obsoletos. Pero Carlos… ¿Cómo se atreve a hablar así de la industria automotriz argentina si Ud. no trabaja en ella? Cierto. No trabajo en ella. Pero como Licenciado en Comercio Internacional veo la realidad mundial de la industria desde hace décadas

Ya hace años que transitamos la ERA EXPONENCIAL de la 4ta Revolución Industrial y la industria automotriz argentina parece no notarlo.

En pleno Siglo XXI, los autos son computadoras con ruedas, que tienen las siguientes características: Hiperconectividad Digital, Inteligencia Artificial, Autónomos y 100% ELÉCTRICOS o HÍBRIDOS!!! Agregaría además, que en los próximos años, también serán DESCARTABLES y RECICLABLES, pero sería adelantarnos demasiado

¿Y en la Argentina, producimos algo así? Definitivamente…NO!!! También muchos podrán decir que el problema de la industria automotriz argentina son la crisis económica, la inflación, un mercado pequeño, etc. Como ya tengo varios años, esos mismos “problemas” los escucho desde los años ’80.

En realidad, el gran problema es la falta de EDUCACIÓN para poder ver a largo plazo, y tener la suficiente adaptabilidad para organizar y realizar los cambios que se avecinan. Siempre hay “señales” que “avisan”. Hay que saber detectarlas, codificarlas y actuar en consecuencia.

En un país donde te contestan frases como… “Eso acá nunca va a llegar”, “Son modas para los gringos”, “A mi no me la vas a contar”, “Yo tengo más de 20 años en esto”, “A mí, déjame con los FIERROS a nafta”, “Es lo que hay”, “Acá es así”, resulta muy difícil que las industrias se adapten a los cambios. Pero cuando estos vienen… ARRASAN CON TODO. Sobre todo en los temas vinculados con la tecnología.

A la ya traumática decisión de comprar un auto, gracias al 50% de IMPUESTOS sobre el valor del mismo, la inflación, los trámites, etc,etc,etc se le suma que en la mayoría de los casos, tampoco saben comercializarlos. Cuando uno va a una agencia a preguntar por un 0 Km, parece que le están haciendo el “favor de venderle un auto”. Y ni hablar de la decoración de sus interiores. En el 90% son de color NEGRO porque “es lo que hay” o “vienen así”. Sin embargo, en algunas empresas extranjeras uno puede elegir la decoración del interior y personalizar el vehículo sin problemas (y no solo en los modelos de alta gama).

Otro problema para el usuario, es la atención en los “servicios post-venta”. Desde los años 70 (50 años) en mi familia tuvimos la oportunidad de comprar solo 3 (tres) 0 Km. Dos fabricados en Argentina, con todos los problemas descriptos y uno fabricado en China. Para el mismo segmento de precio, la diferencia en tecnología, calidad, precio y atención al cliente es altamente favorable al modelo chino.

Cuando estuve en Australia en 1996 (allí fabricaban autos enormes al estilo norteamericano), paradójicamente, en el país donde se realizaba la competencia más importante del mundo sobre electromovilidad solar: el World Solar Challenge el cual con sus 3000 Km de recorrido, permitía el desarrollo de nuevos diseños, materiales, componentes y formación de RRHH para el futuro de la Electromovilidad. Tampoco la industria automotriz australiana, fue capaz de “ver” esos cambios, no solo tecnológicos sino sobretodo CULTURALES.

Pocas décadas después y gracias a la impresionante competencia de sus vecinos cercanos como lo son Japón, Corea del Sur y China, esa industria dejó de existir. También ellos “estaban haciendo autos viejos”.

Recuerdo cuando Jorge Lanata en 2015, por radio realizaba un simpático comentario, señalando que los autos eléctricos de la FORMULA “E” que participaban en el e- Prix de Buenos Aires en Puerto Madero, tenían “ruido a licuadora” (por el zumbido de sus motores). Años después, anunció que era propietario de un LEXUS HÍBRIDO.

Hoy en 2024, el mismo informa sobre la falta de vehículos eléctricos / híbridos fabricados por las automotrices tradicionales argentinas. Su educación y experiencia, le permitió adaptarse a la realidad de la movilidad mundial. BIENVENIDO JORGE AL CLUB DE LA ELECTROMOVILIDAD!!!

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